sábado, 27 de junio de 2009

Con el alma en un hilo

CON EL ALMA EN UN HILO.
La causa de la justicia no avanza hacia buen fin.
La oscuridad aumenta. Las fuerzas disminuyen.
Ahora, después de tantos años de lucha,
estamos peor que cuando comenzamos.
En cambio, el enemigo es más fuerte que nunca;
ostenta su poder con mayor fuerza
y mira a todos lados con ojos invencibles.
Sin embargo debemos reconocerlo:
Fueron nuestros errores los que lo hicieron fuerte.
Cada vez somos menos;
las consignas son confusas.
Nos robaron las palabras y las han retorcido
hasta volverlas irreconocibles.
Preguntas hoy:
¿qué está mal de lo que dijimos entonces?
¿una parte o todo?
¿con quién se puede contar aún?
¿y nosotros, estos pocos que permanecen en la vigilia,
hemos sido expulsados del río de la vida?
¿quedaremos atrás,
sin entender a nadie ya,
sin que nadie nos entienda?
¿se trata de tener suerte o no?
¿o de tener razón o no?
Así preguntas. Espera...
Sólo tendrás la respuesta de tu conciencia,
frente al sufrimiento de la mayoría.
Y al dejar el mundo,
no te preocupe saber si fuiste bueno,
sino si el mundo que dejas es mejor.
Bertold Brecht

Leo este poema casi por casualidad siendo el día que es hoy.
Es el día para pensar porque mañana tenemos que votar legisladores en Argentina.
Casi estaba convencida yo de que esta como tantas otras elecciones son nada más que tiempo perdido.
Un hacerse de cuenta que uno decide cosas que en realidad otros manejan.
Un querer conformarme y conformarnos antes que declinar hacia el convencimiento de que somos nada. Tenemos una ventaja. Somos más. Sólo eso.
Y un montón de desventajas que pueden resumirse en una palabra. Apatía.
Ya no queremos hacer el futuro. Nos cansaron o nos cansamos.
Intentamos durante un tiempo pero ya no. Dejamos que otros le pongan protagonismo y forma a la vida que deberíamos estar construyendo nosotros.
Y de repente este poema.
Me llena de verguenza sentir que no tengo casi ganas de hacer para mañana. De hacer para otros que considero importantes.
Dejé casi que me doblegaran.
Y entonces este poema y tanta vida que vivió haciendo.
Este ejemplo que me devuelve cierta confianza en que se puede.
Un intento más?
Decidir con responsabilidad por ser parte de esta gran maquinaria de la que descreo y rebuzno. Ponerle el cuerpo a la posibilidad de convertir lo que esta mal en algo que este mejor para que un día pueda estar otra vez bien.
Equilibrar la balanza para el lado de los humildes. De los sufrientes que no tienen voz ni ganas de seguir gritando por ayuda.
De los inocentes que siguen creyendo que mañana alguien hará justicia por ellos.
Difícil, cuan difícil.
Discriminar entre los que quieren engañar y venden espejos de colores. Y encontrar un camino que sea genuino y conduzca a algun lugar donde un mundo mejor sea posible.
Votar.

2 comentarios:

Adrian B. dijo...

Hola!! Me gustó lo que escribiste.. y si.. todos quedamos pensando sobre las últimas elecciones y creo que fué muy movilizante, espero que podamos seguir adelante con éstos sentimientos de cambios para hacer un lugar mejor para quienes vienen detrás nuestro!!!

Beso!!!

adry brovia dijo...

Con algunos años encima y experiencia cercana a determinados ámbitos de poder, sigo descreyendo de los que están y lo peor es que descreo más de los que vienen...
Jóvenes con mañas de viejos...
Deseos de riquezas mal habidas y en poco tiempo...
PERO...como soy utópica a ultranza...(siempre lo digo) creo fervientemente que lo que nos falta es juntarnos los buenos... los que deseamos el bien para el prójimo...los que miramos el bosque...
Que ese hilo no se corte...que se vuelva tan poderoso como para arrastrar grandes grupos de grandes espíritus que solo queremos dejar huellas para que los que vengan sepan que hay otras formas de hacer las cosas...o sea...hay formas inteligentes y maneras de hacerlas bien...
Te seguiré leyendo...me gustó.
Adriana